Los rayos y los mástiles de los veleros nunca han sido buenos compañeros de viaje. Y si no una imagen vale más que mil palabras. Es impactante el golpeo de un rayo en un velero amarrado en un puerto de Boston durante una tormenta eléctrica. Afortunadamente nadie se encontraba a bordo del barco, en el momento en que éste recibe de lleno el impacto de este fenómeno meteorológico, sino las consecuencias podían haber sido mortales.
En este caso el tope de palo ha servido como hilo conductor del rayo. Una posible mala puesta de tierra del mástil puede aumentar las probabilidades debido a la baja resistencia por la que debe fluir la corriente eléctrica del rayo.
La mejor protección es conectar el palo con un grueso cable de cobre a los pernos de sujeción de la quilla para que en caso de caer un rayo, las cargas puedan salir tan fácilmente como han entrado por el palo, evitando el riesgo de perforación en el casco.
Guía imprescincible para protegernos de una tormenta eléctrica en el mar por Sergio W. Smith
- Si te compras un barco de vela nuevo asegurate que está equipado con el sistema que une el mástil y la quilla para que si te alcanza un rayo, sea por ahí donde se transmita toda la energía hacia el mar. Si el barco es de segunda mano o usado, pregúntale si lo lleva incorporado de fábrica y si no es así, marcateló como una prioridad.
- Evita utilizar cualquier aparato electrónico. Es recomendable incluso, si es posible, desconectar la baterías del barco de sus bornes.
- En un velero, es fundamental alejarse de la jarcia firme – obenques, stays, burdas, etc – y del mástil, botabara o cualquier pieza metálica cercana como candeleros, rueda del timón o balcón de proa, por ejemplo.
- Si llevas metal encima – anillos, cadenas, reloj, etc – quítatelos y guardalos, a poder ser en un cajón de madera.
- Hay que comprender que estamos en modo supervivencia por lo que navegar a vela no tendría sentido, además que las velas podrían aumentar las posibilidades de que impacte un rayo, generando un incendio a bordo al incendiarse las mismas.
- Colocarse tumbado en el interior de la cabina del barco, alejado de elementos metálicos. Nunca cerca del mástil, si estás en un velero. La bañera del barco está también entre las zonas comprometidas del barco.
Si a pesar de todo, nuestro barco recibe el impacto de un rayo es prioritario hacer una revisión completa de todas las piezas metálicas, de las uniones de la jarcia al mástil, de la sentina y del casco en busca de posibles vías de agua.
Otra recomendación para proteger, en este caso, la electrónica de nuestro barco sería desconectar los equipos – GPS, plotter y radio VHF -, y si es posible, desenchufarlos de los cables de alimentación y bajar las antenas. Esto nos permitirá salvaguardarlos para cuando pase la tormenta y nos sigan siendo útiles para comunicarnos o ayudarnos en la navegación.