Me despierto con la triste noticia de que se nos ha ido Javier Gorostiza a los 59 años de edad. Aunque estábamos lejos físicamente, es de estas personas que siempre que hablas con él –en los últimos años había sido a través de las redes-, era como si el tiempo o la distancia no existieran. Era generoso, amigo de sus amigos, era una persona con una sonrisa eterna y de buena persona, que es lo que era.
Me entra un mensaje en Facebook de un buen amigo común, Ezequiel González, donde cuenta que el fallecimiento de Javi. No me lo puedo creer, hace apenas dos semanas participó en un programa en Radio Muelle, la radio marítima de Tenerife, que dirige Eze.
Javier formó parte durante muchos años en la directiva del Real Club Náutico de Tenerife, siendo comodoros, vice-comodoros y capitán de flota. Como aquél quien dice fue el creador y director de regatas como el Trofeo SAR Infanta Cristina, que tuvo su época dorada a finales de los años 90 y principios del 2000, como buena parte de las regatas de crucero en España. Fue uno de los grandes impulsores del circuito canario que hermanaba a las tres grandes pruebas de crucero del archipiélago que organizaban el RCN Gran Canaria, el RCN Tenerife y Puerto Calero, y que servían como colofón al Campeonato de España de Cruceros. Fue el alma deportiva del RCN de Tenerife en aquellos años. Se preocupó de dar el máximo de difusión a los eventos que celebraban y tuve la suerte de compartir varios de ellos en su club, que era su casa.
Llevaba ya una década alejado de la primera línea náutico-deportiva, y centró todo esfuerzo e ilusión en la Asociación Histórico-Cultural La Gesta, de la que era presidente y de la estaba muy orgulloso, y que rememora la victoria el 25 de julio de 1797 en Santa Cruz, contra las tropas del almirante inglés Nelson y que salvaron a la isla de Tenerife de ser conquistada por la Corona Británica.
Pero la náutica y su club fueron quienes marcaron su vida y que marcan lo que fue, con todo lo que hizo por el RCN Tenerife, hizo suya la frase de que “Nunca le puedo decir que no al club. Siempre seré deudor del club, me ha dado siempre más de lo que yo le he dado”.
Descansa en paz. ¡Hasta siempre Javi!