Con motivo del Día Mundial del Agua, la Fundación We Are Water ha puesto en marcha una acción global de sensibilización que se desarrolla simultáneamente en diferentes países. #TheHiddenLifeOfWater es el nombre de la campaña que este año moviliza a deportistas y otras personalidades de todo mundo para dar visibilidad a todo lo que el agua proporciona.
Han participado en la campaña Jorge Lorenzo, piloto de motociclismo español; Juan Carlos Navarro, baloncestista español; los periodistas Edgar Fornós, Javier Cárdenas y Oriol Domènech. Gonzalo Pérez de Vargas, Viran Morros y Raúl Entrerríos jugadores de balonmano español; Marc Clotet, actor español; Tomàs Molina, meteorólogo español; Anna Espar y Clara Espar jugadoras españolas de waterpolo; Pablo lima, jugador de pádel profesional. Además de otros deportistas de renombre como Carles Puyol, Ona Carbonell, Enric Masip, Albert Luque, Marc Muniesa, Julio Salinas, Nikola Karabatić, i Victor Tomás.


La vida oculta del agua: #TheHiddenLifeOfWater. Con motivo del Día Mundial del Agua y alineada con la temática de Naciones Unidas, la Fundación We Are Water ha puesto en marcha una campaña de sensibilización que pone en valor el papel del agua en nuestras vidas. El agua es un recurso necesario para tener una vida saludable y para crear riqueza y desarrollo. El agua es vida y da vida, el agua es futuro. En muchos países, el acceso al agua significa que los niños y niñas puedan dedicar el tiempo que ahora pierden en recopilar agua en su propia formación y, con ello, en el desarrollo económico y social de sus comunidades. Es responsabilidad de todos dar voz al agua como fuente de vida y de futuro.


En los Roca Galleries de Madrid y Barcelona, en el centro comercial ABC Serrano de Madrid y en las Arenas de Barcelona se han instalado murales para que las personas que quieran participar se hagan una foto enfrente de ellos, y puedan ayudar a difundir el mensaje de un acceso al agua potable más justo y equitativo para todo el mundo.
Datos. En el mundo, más de 2.000 millones de personas viven actualmente en países con demasiado estrés por déficit hídrico, una cifra que se incrementará sensiblemente en las próximas décadas en paralelo a las previsiones de incremento demográfico mundial. En 2050, la población del planeta puede situarse en 9.700 millones de personas frente a los 7.500 millones actuales: según la OCDE, cerca del 40% de la población vivirá en zonas de estrés hídrico severo.