El regatista catalán Didac Costa navega desde la tarde del domingo día 8 de noviembre en la regata más dura y salvaje, la Vendée Globe, la vuelta al mundo en un barco de 60 pies, en solitario, sin escalas ni asistencia. Esta será su segunda participación en la Vendée y su tercer vuelta al mundo tras estrenarse hace cinco años junto a Aleix Gelabert en la Barcelona World Race. Si termina esta Vendée Globe será el primer español en haberlo hecho dos veces, hasta la fecha tan solo él y el bilbaíno José Luis de Ugarte la han acabado. Bubi Sansó, con dos intentos y Unai Basurko con uno, se quedaron por el camino. Su anterior circunnavegación la hizo en 108 días, 9 horas, 50 minutos y 45 segundos.
Horas antes de la salida hablamos con Didac.
Puedes escuchar la entrevista en audio en el podcast #15 Tripulante18
¿Cómo se encuentra a pocas horas para partir y cómo se presenta esta Vendée Globe para usted?
“Tranquilo. La verdad que para mí sigue siendo un reto enorme. Aunque ya haya hecho una, es una regata difícil, muy larga, muy dura. Además el proceso para llegar hasta aquí ha sido muy complicado, pero esta parte ya está superada y a la expectativa de lo que vendrá a partir de ahora. Son muchos días de competición, y este es un tema que sí recuerdo de la edición pasada, que es muy duro, pero a la vez hay que disfrutarlo”.
Aunque cuando salgan al mar se olvida, los previos han sido extraños, sobre todo porque en los días previos pasan por Les Sables d’Olonne centenares de miles de personas.
“Sin duda. Es un contraste increíble lo que se vivió en la salida anterior a esta. En las primeras semanas aunque el village estaba limitado, había mucha gente. Lo viven muy intensamente, pasan por el pantalán a ver los barcos, te saludan…pero desde hace una semana que se cerró al público, esto es un desierto y es muy impactante, porque la Vendée Globe si algo tiene es el ambiente del público, notas muchísimo su calor, sobre todo el día de la salida. Ahora no sabemos muy bien como se va a gestionar el tema del público para la salida, porque en teoría en Francia hay confinamiento y no se puede salir a la calle si no es estrictamente necesario, tengo el recuerdo de la anterior salida y fue increíble”.
Como está llevando el no poder contactar con nadie desde diez días antes de la salida
“Desde que llegamos ya nos han hecho varias pruebas PCR y el viernes previo a la salida nos harán la última. Lo único que se nos permite es ir por la noche al barco para no tener contacto con nadie, para poder comprobar cosas y acabar de ponerlo todo apunto, siempre y cuando no hay gente alrededor. Lo han permitido para que tampoco estemos tan desconectados del barco”.
Para usted será la tercera vuelta al mundo, la primera fue bajo el paraguas de la FNOB, pero los dos siguientes son exclusivamente suyos.
“La Barcelona World Race era un proyecto de la Fundación, pero la Vendée Globe ha sido más propio. La FNOB también nos ha apoyado en estos dos últimos proyectos, pero este último junto con Pep Costa hemos comprado el barco y es un proyecto que gestionamos nosotros y esperemos que sea de futuro”.
Hicieron un crowfunding porque no les llegaba el presupuesto y ha tenido un éxito espectacular. A la semana estaban cubiertos los 20.000 euros.
“Estamos muy contentos de cómo ha reaccionado la gente y ya en anteriores ocasiones nos han querido ayudar y a un mes para la salida decidimos lanzar esta campaña y ha sido increíble, y la gente aún sigue aportando. No es sólo una donación, sino que queremos darles algo a cambio, crear comunidad y que se sientan parte del proyecto”.
El One Planet, One Ocean es de los más antiguos de la flota, es del año 2000, pero han realizado diversos cambios para mejorarlo.
“Es un barco antiguo comparado con los barcos que hay. Hemos hecho varios cambios para aligerar el barco y hemos quitado las orzas de deriva, pensamos que con esto mejoramos las prestaciones para una regata como esta”.
Han recibido ayudas muy diversas
“A nivel técnico nos han ayudado muchas empresas del sector, en Mallorca el Grupo Barco, otras de suministros, a nivel de pintura, el motor…para que el barco esté en las mejores condiciones”.
El barco ha realizado cinco vueltas al mundo y las ha terminado casi todas.
“Es un barco que está probado, con la experiencia de haber hecho dos vueltas al mundo con el mismo barco también me ayuda, lo conozco bien. Pero en una regata como la Vendée Globe puede pasar de todo y hay muchos abandonos, pero sí me da mucha confianza”.
Se puede convertir en el segundo regatista junto a Jean Lecam en dar la vuelta al mundo con un mismo barco.
“No estaba planificado, para mí después de la Barcelona World Race planteamos el proyecto con este barco. A lo mejor me hubiera gustado tener uno más moderno y competitivo, pero al final fue con este”.
Hay como tres grupos de barcos muy diferenciados
“Sí, es una buena manera de clasificarlos. Están los barcos nuevos, hay antiguos que los han adaptado con foils y luego estamos barcos como el nuestro, más viejos. Esta regata siempre ha sido una regata con varias regatas dentro de la misma”.
En la anterior edición tuvo un problema nada más partir y tuvo que volver a puerto, saliendo tres días más tarde y acabando la regata el 14.
“Es lo bonito de esta regata, que pasan muchas cosas inesperadas. Es emocionante seguirla. En la pasada edición parecía que se acababa el mundo al romper a las pocas horas, y al final acabamos bien. Hay que salir a navegar lo mejor posible y luego ya se verá”.
Cual es el sitio más especial de la vuelta al mundo
“La zona del sur es probablemente la más emocionante por las condiciones meteorológicas que te encuentras. También cuando pasas del Atlántico Norte al Sur, pasas en pocos días del calor al frío. La Vendée Globe es especial por navegar por todos los océanos, y los del Sur son muy especiales”.
Como se organiza con los horarios.
“Los horarios los voy adaptando a la meteorología. Al ser en solitario hay que hacerlo todo en función de las condiciones. Si tienes que hacer alguna maniobra importante la haces y te vas adaptando el sueño y las comidas. Lo importante es que las velas siempre vayan bien y el barco rápido”.
¿Cuál es su objetivo final en esta Vendée Globe?
“Siempre es acabar. Terminar una Vendée Globe es haber completado el proyecto para cualquier navegante y por todo el mundo que ha apostado por ti. No me marco una posición, pero sí me gustaría rebajar los 108 días de la edición anterior”.